ENTRE LA INTENCIÓN ORIGINAL Y LA OMNIPRESENCIA ESTATAL POR EL BORRADO DE LA MUJER
La caída en la trampa identitaria de la Ley Micaela
INTRODUCCIÓN
La ley Micaela (LM) se origina a partir del caso de una joven llamada Micaela de 21 años, que fue secuestrada, violada y asesinada en abril de 2017. El asesino había sido puesto en libertad a pesar de estar condenado a nueve años de cárcel en 2012, por violar a dos mujeres en 2010. Un juez lo deja en libertad, meses antes de cumplir la condena, ignorando un informe de peritos intervinientes que lo desaconsejan. Este crimen conmovió al país dando lugar a movilizaciones por Ni una menos y a cuestionar el funcionamiento de las instituciones involucradas.
Su caso expuso varias fallas en el sistema judicial: en la supervisión de personas con antecedentes penales, la libertad condicional y en la lentitud del sistema de justicia que motivó la urgente necesidad de capacitar en esta área. Como resultado, se sancionó la ley N° 27.499, que en su artículo 1º establece la capacitación obligatoria en la temática de género y violencia contra las mujeres.
DESVIACIÓN DEL PROPÓSITO ORIGINAL
La implementación de capacitación obligatoria queda completamente a cargo del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidades (MMGD) quien también debe certificar la calidad de las capacitaciones que elabore cada organismo. Sus lineamientos, que se pueden leer aquí, contemplan los siguientes cuatro ejes temáticos:
1. Derechos Humanos. Marco Normativo Nacional e Internacional;
2. Introducción a la perspectiva de género. Conceptos básicos;
3. Violencias basadas en el género como problemática social; y
4. La perspectiva de género en los organismos del Estado.
En el eje temático 1 se incluyen fundamentaciones jurídicas obligatorias, como por ejemplo, los Principios de Yogyakarta y la Ley de Identidad de género (2012). El eje temático 2 cubre los contenidos de la ideología de género.
El tercer eje sobre violencia habla de: Odio de género(s): Femicidios. Travesticidios, Transfemicidios y crímenes de odio. Travesticidio social. etc. Se adjunta una profusa bibliografía de destacados divulgadores “feministas” queer.
Es evidente que la capacitación experimenta una curiosa reinterpretación. ¿De qué manera se transformaron las deficiencias en las fuerzas de seguridad, la fiscalía, las órdenes de alejamiento y el sistema penal que contribuyen a la violencia sexual, comprometiendo la seguridad y protección de las mujeres a una capacitación para borrar al sexo femenino, sustituyéndolo por la creencia en la identidad de género regresiva, sexista y misógina?
¿Acaso esto no es más que la oportunidad de instruir ideológicamente, con presunciones anticientíficas, a toda la administración pública, para su control político y social? En efecto, sucede que si una persona se niega a recibir la capacitación, será intimada y hasta se puede aplicar una sanción disciplinaria. “El Ministerio de las mujeres, géneros y diversidad puede publicar en su página web la negativa a participar”.
OMNIPRESENCIA EN LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA NACIONAL Y MÁS ALLÁ
La ley establece la capacitación a todos los estamentos públicos nacionales en el ejecutivo, legislativo y judicial de manera obligatoria, cualquiera sea su nivel o categoría.
Para agosto de 2023, el gobierno nacional anuncia la LM en números:
Desde la sanción de la Ley Micaela en 2018, hasta agosto de 2023, se capacitaron 232.997autoridades y agentes de los tres poderes del Estado;
5052 autoridades de 130 organismos públicos participaron en la formación en el marco de 80 encuentros;
Hasta diciembre de 2022, 215.306 agentes estatales de los tres poderes fueron capacitadas y capacitados en el marco de los programas de capacitación certificados por el MMGyD y de los dispositivos dispuestos por el ex INAM;
Desde el 2020, 150 organismos se capacitaron en el fortalecimiento institucional para el diseño de proyectos de formación en Ley Micaela, y 101 organismos realizaron rondas de intercambio de experiencias de implementación de las capacitaciones;
73 programas de capacitación en Ley Micaela fueron certificados, mientras que se están ejecutando en 146 organismos correspondientes a los tres poderes.
Teniendo todo el aparato fluyendo sin impedimentos ni ataduras, hasta la capacitación del Ministerio de Obras Públicas, se titula: "Ley Micaela: Hacia la construcción de espacios de trabajo igualitarios e inclusivos", que no es más que la imposición autoritaria a acordar con las premisas ideológicas impuestas como ley nacional.
Las Provincias y la Ciudad de Buenos Aires (CABA) están invitadas a adherirse a esta ley, “haciéndose parte de la responsabilidad colectiva frente a las reivindicaciones de las mujeres y los colectivos LGTBIQ+ y su derecho a una vida sin violencia” le indica al gobierno nacional, Iniciative Spotlight, el ala ideológica de las Naciones Unidas.
La LM se ha federalizado hasta alcanzar a las provincias de Chaco, Chubut, Salta, Córdoba, La Rioja, Misiones, Neuquén, Santa Cruz y Buenos Aires. Asimismo, Catamarca, Entre Ríos, Jujuy, La Pampa, Mendoza, San Luis, Tierra del Fuego, Ciudad Autónoma de Buenos Aires están en proceso de adhesión.
Por ejemplo, La provincia de Buenos Aires, dispone de su ley Micaela, Nro. 15.134 del año 2019. La magnitud de las capacitación es tan significativa, que la provincia ha diseñado varios cursos como se ve a continuación: -Curso de sensibilización, formación y actualización para autoridades del Poder Ejecutivo; -Curso de formación y actualización de formadoras y formadores para organismos del Poder Ejecutivo; -Curso de formación para trabajadoras y trabajadores del Poder Ejecutivo; -Curso de formación y actualización de formadoras y formadores para municipalidades de la PBA.
El impulso alcanza a otras tantas instituciones como a El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET). Se ejecutará la capacitación en LM en toda su estructura argumentan, porque se espera la transversalización de la perspectiva de género en la comunidad científica, sus compromisos con la diversidad, la equidad y los derechos. ¿Sería válido afirmar que el cambio cultural anticientífico, promovido por las Naciones Unidas, es impuesto autoritariamente, para sofocar no solo la libertad de expresión sino también la del conocimiento científico?
En las universidades estatales la captura queer, con una explícita adopción del programa de Naciones Unidas (NU) y la Iniciativa Spotlight, es apabullante.
Esta consiste en alcanzar a todos los claustros de la comunidad educativa: estudiantes, profesores, investigadores, personal administrativo y cualquier otro grupo que forme parte de ella. El entrenamiento abarca a las políticas identitarias para ”despatriarcalizar” y “desarticular al poder en tanto esquema relacional opresivo”, cultivando una mentalidad de hostilidad y oposición (“trans” vs. “cis”); la corrección política, y el lenguaje inclusivo.1
En la capacitación, su estrategia es entrenar en la aceptación: logran coaccionar a las personas a acordar, manufacturando así docilidad y conformidad, junto con la tolerancia a la humillación pública —para no perder el trabajo o conseguir graduarse. Su propuesta “pedagógica” sostiene la ficción del debate de ideas, cuando en realidad, es una completa sesión de adoctrinamiento sin conclusiones posibles fuera de las sabidas premisas transgeneristas.
Celebran los logros de más de 50 universidades públicas con la LM y se llega a afirmar que el plantel docente y estudiantado de las universidades deberían participar “capacitando” a los estados provinciales y municipales. De esta manera, las instituciones educativas de nivel superior se han convertido en vigilantes del pensamiento único y en agentes de propagación ideológica, con la consiguiente entrada al mundo del trabajo de sus egresados.
La LM hasta se extiende al El complejo industrial y naval argentino TANDANOR que anuncia: “…Además se presentó a cada integrante del astillero el nuevo protocolo de denuncias por motivos de género aprobado y puesto en marcha por el Directorio de la empresa desde el 31 de marzo del corriente año”.
Para las organizaciones de los trabajadores también es imperativo unirse al auge de las políticas identitarias. Se implementa “el Curso de formadorxs “Micaela Sindical” para personas referentas de género de sindicatos de todo el país”. Esta capacitación llega a alcanzar a empresas donde debe existir la perspectiva de género.
Esto es un inventario preliminar de las trayectorias institucionales que toma la LM para adoctrinar a los empleados, cualquiera sea su condición o pertenencia institucional. Pero también la agenda de género avanza transversalmente, junto a otras políticas y disposiciones gubernamentales en la misma dirección, como el caso de la Capacitación, formación y sensibilización del Correo Argentino, por ejemplo, que se suma no sólo con la LM, sino también el lenguaje no sexista, la Ley Yolanda (otra ley por la agenda de las Naciones Unidas).
CONSECUENCIAS DE ESTA IMPLEMENTACION
La LM es un excelente ejemplo de cómo las buenas intenciones son redireccionadas acompañando a la agenda transgenerista, adoctrinando integral y verticalmente a todo el aparato estatal y más allá.
Solo señalo un par de cosas pero hay muchas más para ver. En el área judicial, por ejemplo, esta capacitación claramente adoctrina a los que deben impartir justicia. ¿Qué formas tomarán los valores de la imparcialidad e independencia del poder judicial, originariamente pensados para salvaguardar los derechos fundamentales de las ciudadanas? 2En el área educativa, especialmente en el área de las ciencias sociales, ¿a dónde fueron a parar el valor de la diversidad de paradigmas teóricos, de la libertad de expresión, de pensamiento y de debate, si desde su estructura de autoridad, sólo bajan mandatos prescriptivos y normativos? ¿Qué puede decirse del estudiantado transitando por instituciones que no respetan la libertad del intercambio de ideas, la diversidad de opiniones, la crítica y al cuestionamiento y la tolerancia a la incertidumbre y la ambigüedad?
Como tantos otras áreas del estado capturadas por esta ideología, su razón de ser y su expansión se logra a través de la explotación de todos los recursos del estado nacional y todas las instituciones sociales relacionadas a su causa. Así, la financiación y el desgaste de todos los recursos humanos, tecnológicos, físicos, legales y sociales trabajan en pos de la industria-ideología de género. Y paralelamente, se ha creado un notable número de “especialistas”, “consultores” y “comités” coordinándose al unísono, que solo pueden quedar fuera del juego, si el estado se librara de la ideología del género desde sus mismas raíces.
En su documento afirma: “En suma, creemos que, como decía el referente travesti Lohana Berkins, ‘cuando una travesti entra a la universidad pública, le cambia la vida a esa travesti, cuando muchas travestis entren a la universidad, le cambiará la vida a la sociedad” p. 43.
Esto no es inocente. En el caso de una presentación de una abogada estadounidense, trabajando junto a padres para recuperar a sus hijos, contó que hubo un antes y un después de haber recibido el juez instrucción en el transgenerismo, que luego rechazó su pedido, cuando parecía que iba en la decidirse a su favor (alrededor del minuto 13:00).