TxtReview - IDEAアイデア No. 380-1
Continuamos para bingo.
Creo que la siguiente idea que adquirí hará unos años siguiendo la obsesión Tadanori fue el número 380-1.
Este número es una recopilación del trabajo y obra de Tadanori de 2010 a 2018. Es parecido a un libro que publicó en torno a 2010 y que también tengo por ahí. Sin embargo, incluye una vez más textos “interesantes” en inglés que el libro no.
Si comparamos el número anterior con este es bastante gracioso. En el anterior veíamos a un Tadanori treintañero y aquí vemos a un señor de casi ochenta años. Un señor de casi ochenta años que se viste como un joven treintañero. Es maravilloso, claro. Pero también un poco gracioso. La representación que le hacen como artista maduro y consagrado siempre me ha parecido que le desfavorece si la tomas en serio.
Toda la primera parte es muy suya, bastante ecléctica y con colores llamativos. Sin embargo, en mi humilde opinión, el trabajo que está haciendo es mucho menos interesante que el de los años setenta y ochenta. Continúa trabajando con artísticas, principalmente en la cartelería, pero el vínculo con la tradición japonesa está menos presente.
Menos, presente, pero presente. Hay poca diferencia entre este tipo de composiciones y las de una estampa de grabado japonesa. Colores planos, superposiciones de capas, degradados, los bloques de texto laterales, etc.
Quizá lo que se ha perdido es el vínculo con el rico ecosistema político y social que se dio en Japón durante los años sesenta y setenta. Aplicar el mismo estilo, más humorístico, pero sin esa crítica que tenían sus carteles antiguos, a la cultura Pop para mí pierde bastante.
Los textos que se incluyen son de otros diseñadores o artistas explicando la influencia de Yokoo.
Creo que la opinión de Nick Rhodes, de Duran Duran, muestra bien las dos formas de entender la cartelería. Una vez más, remiten la idea de Arte o Diseño, artista o diseñador, etc. Yokoo, lo ha dicho, es un artista que empezó a hacer posters. Entonces empezaron a decir que era diseñador.
Es más interesante la opinión de Mirko Illic, pero honestamente tampoco mucho más. Se limita a decir que es un máquina, sin analizar prácticamente nada de su obra. La influencia en los noventa del ordenador, algunos vínculos y cosas que ocurrieron en esa década, pero poco más. Creo que se podría haber escrito algo más interesante, la verdad.
El resto de la revista habla sobre Toshihiro Katayama. Su trabajo es interesante una vez más porque, siendo un diseñador de los años 60-70, fue clave en la evolución gráfica de Japón. Además, tiene un vínculo muy claro con, como no, el diseño suizo y todo el temita Bauhaus. Qué pesaos.
En cualquier caso, su trabajo de los años sesenta está bastante guay. Os recomiendo buscarlo.
No me quiero extender mucho más, pero continúa con algún otro diseñador. Si os interesa muchísimo, podéis decirme en comentarios.
¡Nos leemos!